| Cadel Evans ganó la séptima etapa del Giro de Italia | |||
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El australiano Cadel Evans ganó la durísima séptima etapa del Giro de Italia y el kazajo Alexandre Vinokourov volvió al liderato, esta vez con una ventaja de más de minuto sobre el campeón del mundo. Bajo lluvia, frente al viento y con el frío, sobre el barro de carreteras forestales, sobre pendientes tremendas, todos los componentes del pelotón merecieron, más que nunca, el aplauso. Incluso Carlos Sastre, que entró a 5:20 minutos de Evans y se encuentra a 7:06 de 'Vino' en la general antes de la primera llegada en alto del domingo en el Monte Terminillo.
La trampa estaba publicada. Los corredores no podían llevarse a engaño: el séptimo viaje del Giro podría dar sorpresas muy desagradables a corredores con mala suerte, a ciclistas lejos de la mejor forma, a equipos con material de menor calidad... Eso, si no llovía. Pero lo hizo y embarró los casi 20 kilómetros tortuosos de subidas y bajadas sobre grava y y polvo que fue barro pegado a las mecánicas, las ruedas, los jerseys y los ojos. La etapa en seco habría sido para especialistas en clásicas como Pozzato o incluso el mismo Petacchi, que alardeaba. O de Pablo Lastras, uno de los corredores del Caisse de Epargne con más casta y menos suerte en esta edición del Giro. La etapa embarrada fue para pánzeres inmisericordes, corredores de infinita fortaleza, resistencia al sufrimiento y mentalidad granítica. El espectáculo de Alexandre Vinokourov y Cadel Evans, al ataque cuando ya era un milagro mantenerse sobre la bici y no colgársela al hombro, fue inolvidable. A su estela se sumaron un puñado de héroes que llegaron prácticamente juntos: Damiano Cunego, Marco Pinotti, un grandísimo David Arroyo, Garzelli y el francés Gadret. Y no pudieron compartirlo en primera persona el hombre de rosa, Vincenzo Nibali, su jefe en el Liquigas, Ivan Basso y mucho menos corredores como Carlos Sastre, quien penó como ninguno los insufribles últimos 50 kilómetros de una etapa de 220. Los Liquigas, que copaban los tres primeros puestos de la clasificación general, perdieron sus oportunidades justo antes del primer tramo de carretera 'sterrata', como la llaman en Italia. Se fueron a la cuneta en el descenso de un puerto de tercera los tres y, tras ellos, Sastre y los Cervélo. El corredor en rosa hizo un esfuerzo sobrehumano junto a Basso, para marcar dos minutos más que el ganador de la etapa. Clasificacion de la 7ª etapa 1 EVANS Cadel 5:13:37 bonificacion 0:00 20" |
